La impresionante pérdida de 26 kilos de Sam Corlett para su papel en "He Ain't Heavy"
Sam Corlett, conocido por su papel como Leif Erikson en "Vikingos: Valhalla", ha perdido 26 kilos para interpretar a un adicto a la metanfetamina en su nueva película, "He Ain't Heavy". El actor, de 28 años, siguió una dieta extrema, comiendo solo una vez al día y caminando entre 20.000 y 30.000 pasos diarios, aunque ha admitido que le resultó difícil regresar a su normalidad alimentaria después del rodaje.
El actor australiano Sam Corlett, reconocido por su papel de Leif Erikson en la serie Vikingos: Valhalla, ha experimentado una sorprendente transformación física al perder 26 kilos para interpretar a un adicto a la metanfetamina en su nuevo filme, He Ain't Heavy. Esta drástica modificación se alinea con la tendencia de actores y actrices que alteran su físico para cumplir con los requerimientos de sus personajes.
Sam Corlett revela su impresionante transformación física
Sam Corlett ha compartido su orgullo por haber alcanzado su objetivo de pérdida de peso a través de un sacrificio considerable. En sus redes sociales, el actor mostró fotos del antes y después de su cambio físico, destacando cómo pasó de tener 92 kg durante su tiempo en Vikingos: Valhalla a 66 kg para su papel en He Ain't Heavy.
Una rutina rigurosa para una figura demacrada
Para lograr esta notable pérdida de peso, Corlett estableció una rutina estricta que lo llevó a comer solo una vez al día y caminar entre 20,000 y 30,000 pasos diariamente. El actor explicó que alcanzar este estado físico le proporcionó una claridad mental y un acceso emocional que mejoraron su capacidad para interpretar a su personaje, Max.
Desafíos tras finalizar la filmación
A pesar de los logros, Corlett admitió que le costó regresar a sus hábitos alimenticios tradicionales una vez que concluyó el rodaje. Experimentó dismorfia corporal, lo que complicó su transición de vuelta a la normalidad. Este desafío contrasta con su preparación para Vikingos, donde necesitó ganar 10 kilos y adoptar una dieta muy distinta.
Un camino inesperado hacia la actuación
Sam Corlett nunca imaginó convertirse en actor; su viaje comenzó con clases de interpretación para manejar su ansiedad. Aglutinó experiencia en la Academia de Artes Escénicas de Australia Occidental y, tras participar en la película Años de sequía junto a Eric Bana, decidió seguir su pasión. Aunque tuvo un papel en Las escalofriantes aventuras de Sabrina, fue su actuación en Vikingos: Valhalla lo que realmente propulsó su carrera y le brindó reconocimiento internacional.